Diario de a bordo 2. Primera semana

Completamos la primera semana, bautismo amazónico, te van a picar muchos bichos, pero no te rayes, es normal, me picó una avista en la oreja y se me puso como la de otra persona, el calor hace que sea habitual ir en chanclas, por lo menos en el campamento base, tienes que tener mucho ojo de donde pones el pie,  hay que estar constantemente mirando el suelo, bueno y a todas partes, no puedes tocar nada sin haberlo chequeado antes, se me ocurrió perseguir un pájaro en chanclas para fotografiarlo y cuando me di cuenta tenía las piernas llenas de hormigas que no iban en son de paz precisamente.

Te vas a dar cuenta de que las botas de agua y el machete van a ser tus mejores amigos.
El clima es muy húmedo y caluroso, todos los días llueve y sale el sol, no tardarás mucho en aclimatarte, aprovecha la cantidad de frutas que tienes a tu alcance y toma muchos jugos, con el agua también tienes que tener cuidado, pero sin pensarlo demasiado, has de hacerte, al fin y al cabo la gente de acá vive con ella, en los hogares suelen utilizar un filtro de carbono y es suficiente, eso sí, antes de emprender el viaje visita Sanidad Exterior y ponte las vacunas que te recomienden.

El momento de mayor actividad de fauna es la noche y si llueve, mejor, que no te de miedo el agua, solo necesitas unas buenas linternas y pilas de recambio, hay que andar muy despacio para poder revisar todo lo que nos rodea, puedes tener una serpiente enroscada en una liana a la altura de los hombros y ni darte cuenta. Lo normal es que veamos muchos anfibios, insectos y arácnidos, en los arboles escucharás monos y roedores, además de sentir la mirada de alguna rapaz nocturna.



La vida en la selva esta creciendo, son muchos los recursos que tiene y el mayor problema tal vez la minería ilegal o descontrolada, esto está generando la llegada de muchas personas, asociaciones y empresas conservacionistas, se están realizando muchos proyectos de investigación muy interesantes.
Muchos de estos lugares o reservas pueden visitarse, incluso pasar noche en ellos, es una buena opción para conocer la flora y fauna local.



El consejo para la primera semana sería no tener prisa, ir conociendo y aprendiendo las costumbres locales y localizar las zonas donde podemos ir a fotografiar o bichear con seguridad.






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